La receta de la salsa picante tiene un ingrediente secreto que le da ese “toque dulce” que notan todos los que la prueban. El resultado final es un acompañamiento que pica moderadamente sin llegar a enchilar, que no le quita el sabor a las comidas, sino que más bien lo resalta, con el toque ácido de la uchuva y un agradable gusto final más bien dulcito.
Precisamente sobre la idea de agregar la uchuva, Monseñor contó que en la casa de sus papás había una producción y la probó añadir a la receta. También hace un chile más picante, para los que gustan de sabores más fuertes, mezcla solo de panameño y jalapeño.
“Quien ha presionado más para que el emprendimiento tome forma es Monseñor José Rafael (Arzobispo Metropolitano), queremos que sea algo de la Arquidiócesis, por eso le puse a la marca Chepito, y de paso así le encomiendo el proyecto a San José”, dijo.
Actualmente, la salsa se está comercializando por medio de la Escuela Social Juan XXIII. A través de ellos se hacen los pedidos y la distribución “Yo sólo me encargo de hacer las chileras”, dijo Monseñor entre risas.
En la última reunión de obispos, Monseñor Daniel le regaló una salsa a Monseñor Javier Román, obispo de Limón, quien no dudó de probarla. “Está buenísima, la recomiendo en especial para los tamalitos de diciembre”, nos dijo Monseñor.
Lo que se obtiene por la venta de la salsa de momento es para ayudar a la Parroquia El Carmen en San José, con sus muchas necesidades. Para pedidos, las personas interesadas pueden llamar a los teléfonos: 8362-3235 / 8390-9041 y 8423-6262.
La salsa Chepito está hecha de chile panameño, uchuva, y un ingrediente secreto.
Suscríbase a la edición digital y disfrute de todo el contenido. Ingrese en este enlace y conozca nuestros cómodos planes.