El Gobierno de Costa Rica decretó cuatro días de duelo nacional por la muerte del Papa emérito Benedicto XVI. Este período obedece a un duelo de cortesía, por quien sirvió como Sumo Pontífice de la Iglesia Católica, religión del Estado costarricense.
Por lo tanto, se ordena izar la bandera a media asta, a partir del 1 de enero, tal y como lo dicta el artículo 75 de la Constitución Política.
La Presidencia de la República informó que lamenta profundamente su fallecimiento, ocurrido este 31 de diciembre en el Monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano.