Comparto el resumen de los aspectos más importantes: 1. Reconocer que las vírgenes consagradas son un signo escatológico. 2. Reconocer que las vírgenes consagradas son un signo de la Iglesia Esposa, Virgen y Madre. 3. Reconocer el fuerte testimonio que dan las vírgenes consagradas a la sociedad con su opción de vida. 4. Reconocer el signo de esponsalidad que representan pues así ama Dios a su pueblo, es decir, a su Iglesia. 5. Se dieron muchas sugerencias porque la vocación es poco conocida entonces se pide no comparar el Ordo Virginum con la vida religiosa, tener más apoyo y formación del tema por parte de los Obispos y el clero en general, así como más divulgación en toda la Iglesia. También se pidió dar mas apoyo a la formación inicial de las candidatas.
Los temas más ausentes en el foro fueron: 1. La importancia de contar con la instrucción vaticana Ecclesiae Sponsae Imago que aún no es muy conocida entre Obispos y sacerdotes. 2. El hecho de que a veces se consagran mujeres sin la formación adecuada o mujeres que escapan de la vida religiosa y no hacen un correcto discernimiento hacia el Ordo Virginum. 3. La cantidad y variedad de carismas del Ordo Virginum que representan una gran riqueza para la Iglesia. 4. Al no entender bien la vocación, a veces se quiere incluir en una vocación comunitaria o en una estructura y esta es una opción individual de vida consagrada y de una respuesta personal a Dios. 5. La sororidad entre consagradas para que haya un verdadero ambiente fraterno, aunque no vivan en comunidad ni tengan superiora. El Obispo es fundamental, muchas veces está ausente o delega todo a un sacerdote.
Al final se presentaron propuestas que se resumieron de la siguiente manera: 1. Un mayor apoyo a la promoción y divulgación de la vocación por parte de toda la Iglesia. 2. Un mayor apoyo por parte de los Obispos, que se preocupen por entender esta vocación para que las vírgenes consagradas puedan ser valoradas, tomadas en cuenta y que se les brinde una correcta formación inicial y permanente. 3. Que pueda haber un mayor estudio del documento Ecclesiae Sponsae Imago para una mejor comprensión de la vocación. 4. Reconocer que las vírgenes consagradas son un signo escatológico de la promesa de Jesús sobre el Reino Futuro y que en este mundo son imagen de la Iglesia Esposa, Virgen y Madre. 5. Reconocer que las vírgenes consagradas son mujeres seglares, no religiosas. Es importante no confundirlas con congregaciones y respetar que es un carisma personal, que no viven en comunidad, no tienen superiora ni coordinadoras. Debe respetarse la libertad de sus carismas y comenzar a visibilizar y por tanto a valorar más el testimonio de estas mujeres en la Iglesia.
En el mundo hay más de 5 mil consagradas y en América Latina y el Caribe debe haber más de 600, este número debe corroborarse, pero es sin duda una de las regiones del mundo donde más florece la vocación. Durante todo el año vemos cómo se celebran consagraciones y ahora están naciendo vocaciones en países donde aún no existían o había muy pocas como fue el caso de Uruguay. Costa Rica no es la excepción, solo la Diócesis de San Isidro tiene once muchachas en formación inicial y discernimiento, lo cual para nuestra sociedad creo que es una multitud.
Es una gran alegría que el tema del Ordo Virginum llegue a la Asamblea Eclesial, no solo por este foro temático sino por tantos países que lo incluyeron en su proceso de escucha.
La mujer en sus diversas vocaciones está presente en la Asamblea Eclesial. El Papa Francisco ha insistido tanto en el rol de la mujer en la Iglesia y repetidas veces nos ha dicho que la Iglesia es femenina porque es Esposa, Virgen y Madre, fundamentos del Ordo Virginum y razón por la cual es una vocación absolutamente femenina.