Mes y medio después de haber sido expulsadas de Nicaragua por el gobierno de Daniel Ortega, las Misioneras de la Caridad Santa Teresa de Calcuta inician su nueva misión en la Parroquia Patriarca San José, en Cañas de Guanacaste.
De acuerdo con una publicación hecha en Facebook por la Pastoral Social diocesana, allí estarán cuatro religiosas: Hmna. Venita, superiora encargada; Hmna. Esperanza; Hmna. Trinidad; y Hmna. Paola. Tres de ellas son parte de las 18 que fueron expulsadas de Nicaragua. Ellas dedicarán sus oraciones, trabajo y esfuerzos en la atención de los más necesitados entre los necesitados, según informó la Diócesis de Tilarán-Liberia. (En la fotografía aparece también la superiora regional de misiones, la Hermana Agnecita).
Ayer, domingo 11 de setiembre, las religiosas tuvieron su primer encuentro oficial con los fieles de Cañas. El párroco, Pbro. Harvey Flores les dio la bienvenida y pidió oraciones por su labor.
Como gesto de solidaridad, al final de la Santa Eucaristía, los niños del segundo nivel de catequesis subieron al altar vestidos con sandalias, tal como lo hacen tradicionalmente estas religiosas.
Un total de 18 Misioneras de la Caridad fueron expulsadas por el gobierno orteguista, al igual que un centenar de organizaciones sociales, acusadas de no respetar las leyes de Financiamiento al Terrorismo y de Financiamiento a la Proliferación de Armas de Destrucción Masiva, entre otras ocurrencias.
Las 18 llegaron a territorio costarricense y fueron acogidas precisamente en la Diócesis de Tilarán-Liberia y posteriormente en la Casa Hogar de las Misioneras de Santa Teresa de Calcuta en Coronado, San José, donde la congregación atiende a niños y adultos mayores.
También se cuenta con presencia de estas religiosas en la Diócesis de Limón y más adelante se anunciará la instalación de religiosas de la rama Contemplativa en la Diócesis de Cartago.
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