Face
Insta
Youtube
Whats
Jueves, 28 Marzo 2024
Suscribase aquí

Tus dudas: ¿Por qué los católicos no guardamos el sábado?

By Mons. Vittorino Girardi S. Enero 13, 2023

“Tuve ocasión de viajar a Guatemala y con sorpresa encontré a unos amigos que en un tiempo eran católicos, pero ahora afirman pertenecer a un grupo en que se insiste que por fidelidad a Dios y a su ley (Torah, dicen ellos) debemos volver a celebrar el Sábado, como día del Señor, y ya no el domingo. Frente a mi sorpresa, insistían en que el mismo Jesús observaba el sábado y que, en este día, como consta en los Evangelios, se reunían en la Sinagoga para la lectura de la Palabra de Dios y para la oración. ¿Cuál debería ser nuestra respuesta, Monseñor?Me uno a los muchos que le agradecen su ayuda”.

Jennifer Mora L. - San José

 

Estimada Jennifer, no sólo en Guatemala hay grupos de Sabatistas, ya que así se les denomina a los que usted encontró allá, sino también -aunque no numerosos- los tenemos en Costa Rica.

En el Antiguo Testamente se insiste, y mucho, en la observancia del Sábado, y en donde había judíos eso era lo primero que los distinguía de los demás, no judíos. Leamos, por ejemplo, un texto del Deuteronomio 5, 12.14: “Ten en cuenta el sábado para consagrarlo al Señor, tal como el Señor, tu Dios, te lo ha ordenado. Trabaja seis días y haz en ellos todo lo que tengas que hacer, pero el séptimo día es el día del reposo, consagrado al Señor tu Dios […] para que todos descansen igual que tú”.

El Evangelista San Lucas, nos informa que Jesús, como fiel judío, y “como era su costumbre”, el sábado iba a la sinagoga (cfr. Lc, 4, 16).

No nos sorprende, entonces, la pregunta: “¿Por qué los católicos no guardamos el sábado?

Es útil hacer notar que esta pregunta nos hace recordar las repetidas polémicas que se dieron entre los judíos fariseos y Jesús. En los Evangelios encontramos al menos siete narraciones en que se nos informa de esas duras polémicas. Por ejemplo, en Mt 12, 1-8, cuando los fariseos reaccionaron muy duramente porque los apóstoles, hambrientos, estaban arrancando espigas en los campos que daban al camino en que se encontraban. Pero ese día era sábado…

En uno de esos debates, concluyó Jesús con una afirmación del todo inesperada, pero muy iluminadora para nuestra pregunta. Él declaró: “el sábado se hizo para el hombre, no el hombre para el sábado. Por esto, el Hijo del Hombre (Jesús) tiene autoridad también sobre el sábado” (Mc 2, 27-28).

Ahora bien, hay que tener presente que lo importante de este mandamiento, que llegaba del Antiguo Testamento, es destinar un día de cada siete para el descanso y para el culto. De hecho, la palabra “Sábado” viene del hebreo “Sabatt”, que quiere decir, precisamente “descanso”; y eso acontecía cada siete días -como ya dijimos- y, entonces, hablar del “sétimo día” y hablar del “descanso” (sabatt), es equivalente.

Los primeros cristianos comprendieron el verdadero significado de este mandamiento, a saber, guardar un día cada semana para el culto y el descanso, y para no crear confusión con la religión judía, escogieron para esos dos fines (culto y descanso) el día siguiente al sábado, el primer día de la semana, a saber, el domingo. Hay que tenerlo bien presente, ese primer día, es el día de la Resurrección y el día de la venida del Espíritu Santo, 50 días después de la Pascua judía… Se trata de  los dos acontecimientos de capital importancia para la vida de los cristianos.

Según consta en el Nuevo Testamento, el paso al domingo o primer día de la semana, precisamente como día del culto y del descanso, aconteció con el nacer de la primera comunidad cristiana, lo que equivale a afirmar que el cambio ha sido establecido por los mismos Apóstoles.

Basta algún ejemplo. “El primer día de la semana  (domingo) nos reunimos para partir el Pan (Eucaristía) y Pablo estuvo hablando a los creyentes…” (Hch 20, 7).

Cuando, además, San Pablo exhorta a los corintios, para que sean generosos en la colecta en favor de los cristianos necesitados de Jerusalén, les escribe: “los primeros días de la semana, cada uno de ustedes deposite lo que haya podido ahorrar…” (1 Co 16, 1-2).

En el mismo libro del Apocalipsis, que tan insistentemente hace referencia a las celebraciones, leemos: “Yo Juan, su hermano […] caí en éxtasis el Día del Señor” (Ap 1, 9-10) y todos entendían que el Autor se refería no al Sábado, sino, al Domingo.

Concluyo diciendo pues, que no tiene sentido protestar, en nombre del Antiguo Testamento, en contra del cambio introducido por los mismos apóstoles, como si Cristo no hubiese venido a salvarnos, culminando su obra, con el Misterio Pascual de Pasión, muerte y Resurrección.

Acojamos, pues, lo que San Pablo escribió a sus colosenses: “Nadie los critique a ustedes por cuestiones tales como días de fiesta, lunas nuevas o sábados… La verdadera realidad es Cristo” (Col 2, 16-17).

 

Suscríbase a la edición digital y disfrute de todo el contenido. Ingrese en este enlace y conozca nuestros cómodos planes.

Last modified on Viernes, 13 Enero 2023 12:03

Síganos

Face
Insta
Youtube
Whats
semana-santa.jpeg
puntosdeventa
Insta
Whats
Youtube
Image
Image
Image
Image
puntos de venta
suscripciones
Catalogo editoria
publicidad
puntos de venta
suscripciones
Catalogo editoria
publicidad