Nunca en mi vida había visto a hombres tan recios y maduros rezar con tanta Fe como en este lugar… acá se ora, se clama y se llora… y todo se eleva al Altísimo como ofrenda agradable al Señor.
El día que presentaron en las noticias la develación del Mosaico de nuestra Señora de los Ángeles en los jardines del Vaticano un gran silencio se tornó en el recinto penitenciario; y al saber que habían en el Mosaico pequeños trozos de piedras provenientes de los centros penitenciarios, muchos de los allí presentes, lloramos en acción de gracias… pues la Madre de Dios y Madre nuestra, una vez más estaba pensando en nosotros… La Santísima Virgen Maria que ahora engalanaba los Jardines del Vaticano se posaba sobre pequeños fragmentos de piedra de las cárceles de Costa Rica. Esas piedras hablaban… nos hablaban a nosotros, para mostrar la misericordia de Dios y de su Santísima Madre en la advocación de Nuestra Señora de los Ángeles, Patrona de nuestra Patria. Ese día muchos nos abrazamos y dimos gracias a Dios y a nuestra Madre.
¡Un aire fresco de esperanza nos llegaba desde Roma con la sonrisa de María Reina de los Ángeles y Madre de los privados de libertad…!
Gracias a Paula en el Bosque (Paula Saenz Soto) por pensar en nosotros y gracias a los que materialmente hicieron posible este magnífico mosaico, que como sus palabras lo dicen; es un «mosaico», un grupo de piedritas de múltiples colores que representan a una nación entera, su Fe, su Esperanza y su Amor… piedritas de conventos, de Iglesias, de parques naturales, de las Diócesis del país y de todos sus fieles… incluso los fieles que hoy están privados de libertad. La Madre de todos nos agrupó a todos los hijos suyos.
A través de la mano de Paula, María quiso que todos estuviéramos presentes con Ella y así nos dio su paz y consuelo. La Madre consoladora de los hijos afligidos, nos hizo llegar su luz de esperanza y su bendición.
Que el Señor del cielo y su Santísima Madre bendigan a Paula y que por medio de este mosaico de luz brille para todos los cristianos la luz de Cristo Jesús.
Que la Santa Madre de los cautivos ruegue por nosotros.
1 de noviembre del año de nuestro Señor MMXXI, Festividad de todos los Santos.
Un recluso.