Monseñor Mark Gerard Miles, nombrado por el Papa Francisco como nuevo Nuncio Apostólico en nuestro país, arribó la tarde de este lunes 2 de setiembre al aeropuerto internacional Juan Santamaría. Fue recibido por el encargado de negocios a.i. de la Nunciatura Apostólica Mons. Laurentio Dancuta, varios obispos del país y personal de la Cancillería de la República.
“Tengo ganas, sí”: con estas palabras, el Papa Francisco confirma su disposición de realizar un viaje apostólico a China, en una entrevista concedida al Padre Pedro Chia, director de la Oficina de Prensa de la Provincia de China de la Compañía de Jesús.
El diálogo de casi diecisiete minutos fue publicado en las redes sociales de la congregación y grabado en la Biblioteca del Palacio Apostólico del Vaticano el 24 de mayo, memoria de Nuestra Señora Auxiliadora, patrona del santuario de Sheshan. El Pontífice manifiesta su deseo de visitar dicho santuario, en Shangái, y comenta que tiene una imagen de esta advocación mariana en su residencia, en Casa Santa Marta.
“Cuando el sacerdote se acerca a una persona para darle la Unción de los Enfermos, no está necesariamente ayudándole a despedirse de la vida. Pensar así es renunciar a toda esperanza. Es dar por sentado que después del cura llega el enterrador”, asegura el Santo Padre en “El Video del Papa” con la intención de oración para julio de 2024, producido por la Red Mundial de Oración del Papa (RMOP) en colaboración con un equipo de profesionales de la Arquidiócesis de Los Ángeles.
En el video, difundido el martes 2 de julio, el Obispo de Roma afirma que “la Unción de los Enfermos es uno de los 'sacramentos de sanación', de curación, que sana el espíritu. Y cuando una persona está muy enferma conviene darle la Unción de los Enfermos. Y cuando una persona ya está anciana, conviene que reciba la Unción de los Enfermos”.
Desde hace tiempo me intriga saber qué inspira al Papa Francisco a escribir cartas y ponerlas debajo de su querida imagen de San José Dormido, tal y como varias haces ha relatado que hace, recomendando la intercesión del glorioso protector de la Sagrada Familia y santo patrono de la Iglesia Universal. ¿Existen antecedentes históricos o relatos que arrojen luz sobre este acto de fe?