Se trata de llevar la presencia de Cristo, por ejemplo, a un país donde los cristianos son minoría, como en Camboya, donde el cristianismo es profesado por menos del 1% de la población; o servir en medio de una tribu en Kenia, donde aun las mujeres sufren violaciones a los derechos humanos como la ablación o mutilación genital.
Después de ocho días en barco, subiendo por el río Amazonas, llegamos a Tabatinga, en la triple frontera de Brasil-Colombia-Perú. Salimos del puerto de Manaus en medio de mochilas, hamacas de muchos colores e historias dibujadas en los rostros de tantos viajeros con quienes compartimos el barco y la vida.
Luego de una rápida visita a Leticia en Colombia, continuamos anoche nuestro recorrido, esta vez en una lancha, hacia Iquitos en Perú. Mientras escribo estas líneas, me acompaña un sol que apenas nace, el imponente río y la fuerza del misterio divino que me invita a remar hacia aguas más profundas, allí donde las heridas están más abiertas y las vidas más amenazadas.
De los 15.176.000 nuevos católicos que registra el Anuario Estadístico 2020 presentado por la Agencia Fides, 9.208.000 corresponden a nuevos católicos africanos, convirtiéndose éste en el continente donde mayormente crece la Iglesia.