La Jornada se celebra desde el 2015 todos los 8 de febrero, en el marco de la festividad de Santa Josefina Bakhita, una mujer que sufrió en carne propia este flagelo, pues fue raptada de su pueblo natal en Sudán, obligada a caminar casi mil kilómetros y “vendida” en varias ocasiones hasta servir como esclava doméstica en una casa donde recibió todo tipo de maltratos y vejaciones.
Como apoyo para orar y reflexionar sobre este horrible crimen, los fieles cuenta con una serie de materiales que pueden descargar en el sitio web oficial de la Jornada.
La hermana Abby Avelino es coordinadora de Talitha Kum, una organización dedicada a la lucha contra la trata y que colabora con la realización de esta Jornada. Ella compartió un mensaje, por medio de un video, durante la celebración del Ángelus del domingo 4 de febrero.
“Todavía hoy, muchos hermanos y hermanas son engañados con falsas promesas y luego sometidos a explotación y abusos. Unámonos todos para luchar contra el dramático fenómeno global de la trata de seres humanos”, expresó.
El videomensaje también incluyó algunos testimonios de sobrevivientes. Entre ellos el de Mary Wangithi de Kenia. “Es muy importante para nosotros -dijo- dar esperanza a aquellas personas que han sido explotadas. Decirles que todavía hay esperanza, a pesar de lo que haya sucedido en el pasado... Ahora, con nuestra ayuda, todavía pueden hacer realidad sus sueños y hacerlos crecer... Después de que el árbol es tallado, con la lluvia y los fertilizantes, vuelve a crecer".
La Red Mundial de lucha contra la Trata da a conocer que, miles de personas de todo el mundo -en numerosas parroquias, comunidades, asociaciones- se reunirán para reflexionar, rezar, compartir su experiencia de compromiso contra este fenómeno mundial.
La hermana Abby también dijo que: "La trata está a nuestro alrededor, en nuestras ciudades, pero a menudo es invisible a nuestros ojos. Con este Día, queremos aumentar la conciencia sobre la trata, reflexionar sobre la situación de violencia e injusticia que sufren las víctimas de este fenómeno global y proponer soluciones concretas".
La trata en Costa Rica
La Oficina Internacional de los Derechos del Niño ( IBCR) señala que, a pesar de los esfuerzos, Costa Rica enfrenta desde hace varios años un recrudecimiento de este delito, que afecta a una proporción cada vez mayor de su población, especialmente entre las comunidades vulnerables.
El Informe de Trata de Personas 2023, publicado por la Embajada de Estados Unidos, señala que el gobierno costarricense identificó en 2022 a 38 víctimas de trata (13 víctimas de trata sexual, 11 víctimas de trata laboral, cinco víctimas de trata sexual y laboral, y nueve víctimas de formas no especificadas de trata).
Es decir, hubo un aumento en comparación con las 21 víctimas contabilizadas en 2021 y las 50 en 2020.
De acuerdo con el Informe, las autoridades informaron que hubo 18 víctimas mujeres adultas, 14 víctimas niñas, una víctima hombre adulto y cinco víctimas menores. De las 38 víctimas identificadas, 20 eran costarricenses y 18 extranjeras.