En el mensaje para la celebración, Monseñor Román indica que “con gran alegría celebramos por primera vez en nuestro país un día dedicado a tanto hombres y mujeres que en diferentes tareas dentro y fuera de la Iglesia desempeñan la misión de evangelizar y dar testimonio de discípulos del Señor en la sociedad actual”.
Junto a los demás obispos expresó que: “Nos unimos a la celebración que viene a reforzar el compromiso de caminar juntos pastores y laicos, porque como bien nos recuerda el papa Francisco a ninguno nos bautizaron cura ni obispo, a todos nos bautizaron como laicos, los laicos son protagonistas de la iglesia”.
Recemos -agrega- para que en virtud del bautismo los fieles laicos, participen más en instancias de responsabilidad en la Iglesia, sin caer en los clericalismos que anulan el carisma laical.
“No se trata de una operación sociológica o de querer garantizar mayores cupos para un reparto de poder entre mujeres y hombres, entre laicos y clérigos. Tampoco se trata de una demanda de espacio para obtener puestos de trabajo, sino de tomar conciencia del sentido de nuestro bautismo, comprendiendo el lugar de cada uno en la iglesia que, para ser tal, no puede renunciar a los aportes específicos de los laicos que por vocación son parte constitutiva de ella” concluyó.
Propiamente para el Día Nacional, explicó el Padre Luis Aguilar, “se quiere motivar que en cada parroquia a que se celebre una eucaristía que tenga como intención principal la oración por los laicos y la gratitud por su servicio”.
En coordinación con la Comisión Nacional de Liturgia se está preparando un subsidio que servirá de apoyo para dicha celebración. Además, en las emisoras católicas ya reproducen el himno, así como videos con mensajes de los obispos a propósito de este día.
El logo del Día Nacional
Una cruz, una llama, una luna y dos imágenes de personas conforman el logo del Día Nacional del Laico. Según explicó el sacerdote secretario de la Comisión Nacional de Laicos, Pbro. Luis Aguilar la luna significa la Virgen María, madre universal y dispensadora de la gracia.
La llama está relacionada con la Santísima Trinidad, mientras que la Cruz y los ochos círculos representa el sacrificio, la redención y la resurrección de Jesús así como el anuncio de la palabra viva. Los ocho círculos significan las diócesis del país. Los laicos significan un llamado: “Llamó a los doce y los envió de dos en dos.
