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“Hay que volver a leer la encíclica Laudato Si’”

By Noviembre 25, 2021

Este año ocho parroquias, dos centros educativos católicos, el Departamento de Pastoral Social de la Arquidiócesis de San José, un convento en El Salvador, un colegio colombiano y dos iglesias evangélicas pudieron izar la Bandera Azul Ecológica en sus instalaciones.

Las inscripciones para participar el próximo año inician en enero, usted puede participar con su parroquia, centro educativo católico o convento. A continuación, un extracto de la entrevista con el Padre David Solano, integrante del Equipo Técnico de la Categoría Eclesial Ecológica del Programa Bandera Azul Ecológica (PBAE):

 

¿Cómo nació la Categoría Eclesial Ecológica?

Primero hay que recalcar que el PBAE existe desde 1995, algunos lectores pueden recordar que empezó con la categoría “Playas”. Con el tiempo se han incorporado una serie de categorías: Centros educativos, Comunidades, Hogares Sostenibles, Eventos especiales, Microcuencas… Actualmente hay 20 categorías.

Cuando el Papa Francisco publica la Encíclica Laudato Si´, un grupo de miembros del Programa se animan a proponer la creación de una Categoría Eclesial Ecológica: Darner Mora, director ejecutivo del PBAE, Roberto Fonseca (jubilado, actualmente promueve el Programa en la Diócesis de Puntarenas) y otros laicos se animaron a diseñar la Categoría. Además, tienen la osadía (en el buen sentido) de proponer la idea a los obispos, quienes deciden apoyarla.

Un dato interesante es que esta es la primera Encíclica dirigida a todos los habitantes del planeta. Por lo tanto, nuestros amigos se animaron y pusieron como objetivo incentivar la participación de todas las organizaciones eclesiales de cualquier denominación religiosa.

Por otro lado, la Conferencia Episcopal es una contraparte de la Categoría y parte de la Comisión Nacional del Programa Bandera Azul, eso significa incluir a un miembro, desde el 2017 me pidieron asumir la representación de la Iglesia e integrarme como miembro del Equipo Técnico de la Categoría Eclesial Ecológica, el cual tiene como fin acompañar a los diferentes comités.

 

¿Qué deben hacer las parroquias para participar?

El proceso se realiza año con año, el primer paso es conformar un comité en la organización eclesial de cualquier denominación religiosa (podría ser una parroquia, centro educativo católico, convento…). El comité debe estar integrado como mínimo por cinco personas que tengan relación con el sacerdote (o pastor) de la comunidad religiosa inscrita.

Por ejemplo, en la Parroquia Inmaculada Concepción, en Heredia, están inscritos cuatro laicos y uno de sus sacerdotes; en la Iglesia Emmanuel (de denominación evangélica) están inscritos los dos pastores y otros integrantes.  Una vez conformado el Comité se procede a la inscripción, esta se realiza todos los años del 1 de enero al 31 de marzo.

Es un proceso que la comunidad hace para apoyar la causa que la Encíclica plantea, por lo tanto, hay que cumplir con una serie de requerimientos. En la página web del PBAE hay un Manuel de Procedimientos y materiales de apoyo para los comités con el objetivo de facilitar su participación.

 

Luego viene el Diagnóstico Inicial…

Del 1 de enero al 30 de abril, los Comités deben presentar el Diagnóstico Inicial (hay un machote en la página del PBAE). Se solicitan datos sobre el consumo de agua, electricidad, combustibles, entre otros. Este es el punto de partida.

A partir de aquí, se establece un Plan de Trabajo para todo el año, es decir, cómo vamos a hacer para mejorar los indicadores del Diagnóstico Inicial, para mejorar la gestión de residuos sólidos, para propiciar una espiritualidad Laudato Si´, entre otros.

 

¿Y cómo califican a los ganadores de la Bandera Azul Ecológica?

Bueno, del 1 de enero al 15 de febrero del siguiente año los comités deben enviar al Equipo Técnico el Informe Final. Se hace la evaluación, si falta algo o algo no coincide con la evidencia presentada se les hace una solicitud para que completen lo que haga falta.

Cada parámetro tiene un puntaje y para ganar la Bandera Azul Ecológica la nota mínima es un 90, puede parecer una nota alta pero no es tan difícil de lograr, hay que ir paso a paso, básicamente es ejecutar el Plan de Trabajo que ellos mismos elaboraron.

En el Comité ofrecemos una charla de inducción a los comités nuevos, aunque pueden participar los que ya tienen experiencia. También damos un taller para hacer el Informe Final.

Cada parámetro tiene un puntaje: Consumo de Agua: 15 puntos/Consumo Combustibles fósiles: 10 pts./Consumo de Energía eléctrica 10 pts./Gestión de residuos sólidos 10 pts./Bien común 10 pts. /Compras sostenibles 10 pts. /Gestión de riesgos 15 pts./Evangelización ecológica 20 pts.

Es importante mencionar que, con ocasión de los 10 años de la Encíclica, El Vaticano publicó los 7 objetivos Laudato Si´. Vimos que cumplíamos con seis de los siete, nos faltaba el que dice Respuesta al clamor de los pobres (defensa de la vida humana desde la concepción hasta la muerte y de todas las formas de vida sobre la tierra, con especial atención a los grupos vulnerables…). Sabemos que ya las parroquias llevan a cabo acciones en esta línea, sin embargo, decidimos incluir el parámetro Bien Común, de esta forma, nos alineamos con la Santa Sede a través de la Plataforma de Acción Laudato Si´.

 

¿Qué tipo de actividades desarrollan las parroquias, conventos, centros educativos católicos y otros para ganar la Bandera Azul?

Se analiza si utilizan las estrategias de las R´s (reducir, reciclar, reutilizar…), si se imparte educación ambiental o actividades extra, como en el parámetro Bien Común. Se gana la Bandera Azul Ecológica con una Estrella Blanca con una calificación entre 90 y 100 puntos, pero si un comité obtiene 100 y además promueve estilos de vida saludable y sostenible, construye huertos, usa compostaje… puede obtener dos estrellas blancas.

Si, además, promueve la Categoría Eclesial Ecológica en otra sede (o filiales), por ejemplo, una parroquia involucra a tres filiales, puede ganar tres estrellas. Aun más, si tienen todo eso y realizan campañas para reducir hábitos de consumo negativos, pueden ganar cuatro estrellas. También pueden organizar Eventos Especiales (fiestas patronales, conciertos…) que sean sostenibles y cumplan con los parámetros.

Todavía más, pueden ganar Estrellas de Colores. Por ejemplo, si además de participar en la Categoría Eclesial Ecológica logra que las familias participen en la Categoría Hogares Sostenibles (Estrella Verde). Si se inscriben en Ecolones (Estrella Plateada), si hacen un trabajo conjunto con organizaciones de bienestar animal (Estrella Amarilla), si realizan campañas de recolección y rescate de alimentos obtienen la Estrella Morada.

 

Para este 2021 se inscribieron 27 parroquias y organización católicas, sin embargo, en todo el país, solo parroquias hay casi 300 ¿No cree que falta más participación?

Como Iglesia, hemos tenido una consciencia paulatina, fruto de ese esfuerzo es la Encíclica Laudato si´, de igual forma así ocurre en las comunidades y parroquias.

Hay un Comité Técnico y se trabaja en la difusión del Programa. Creo que hay que trabajar mucho para acercar las propuestas a los líderes religiosos de las comunidades, porque necesitamos involucrar a todos los niveles en este proceso de cambio, no solo a la comunidad en abstracto. La difusión no ha sido la mejor, hay pocos espacios para hablar de la categoría.

A veces uno va a una comunidad y hay un rótulo que dice Comunidad sostenible, galardonada con PBAE (hace poco pasé por Turrubares y Jacó, por ejemplo) ¿Están involucrados los laicos de la Parroquia? Probablemente, pero quizá no saben que existe una Categoría Eclesial Ecológica.

 

¿Pero a estas alturas los sacerdotes en las parroquias no deberían ya estar conscientes de lo que pide la Encíclica y participar en el programa?

Creo que hay que volver a leer la Encíclica, por experiencia personal, a veces uno llega a dar un taller y cuando habla de Laudato si´ se nota que hay personas que no tienen idea de qué les están hablando, y hablo de comunidades católicas. Entonces hay que volver a leer la Encíclica, además, no parto de que todos los sacerdotes la hayamos leído, así que hay que leerla, entenderla y traerla de nuevo a discusión.

Luego, conocer la Categoría (los parámetros) y preguntarse: ¿Cómo cumplo yo? Por ejemplo, se podría cambiar la iluminación de bombillos incandescentes por luces led. Esto me recuerda que en un templo no tenían dinero para comprar luces led, entonces pusieron láminas acrílicas en el techo para aprovechar la luz de día, lograron reducir bastante el consumo y ahorrar dinero.

Precisamente, queremos abrir un Taller de Intercambio de experiencias para conocer qué hizo este Comité en tal comunidad, qué hizo este otro y aquel, qué hicieron en la Parroquia de Dulce Nombre de Jesús en Mercedes Sur y qué los hermanos de la iglesia Emmanuel, conocer y compartir sus ideas y aportes.

 

¿Cuáles son los principales logros que usted destacaría desde que se creó la Categoría Eclesial Ecológica?

Desde hace seis años. Un logro es haber involucrado a más comités y galardonar a más comités. En 2017 se galardonó a 5 comités, este año se galardonó a 16 comités nacionales y dos extranjeros. Para mí es todo un logro, porque es ir haciendo consciencia en la comunidad eclesial de que es necesario un cambio.

Asimismo, la internacionalización de la categoría, por ejemplo, hay un interés enorme de la Arquidiócesis de Madrid de participar, así como el poder vincular el programa a las redes de trabajo de la Santa Sede y no ser un programa aislado. ¿Evaluar un comité en otro país? Este año en el Convento San Antonio de Padua en El Salvador hicieron un video y sacaron la bandera, era mucha la felicidad, entonces uno se pregunta ¿qué supone para un comité y una comunidad ganar la Bandera Azul Ecológica?

¿Puede enviar un mensaje de motivación a las organizaciones, parroquias y centros educativos para que se sumen y hagan de sus comunidades espacios más ecoamigables?

Creo que lo más importante es resaltar que en enero se abren inscripciones. La Categoría nos permite ordenar procesos internos, no solo para obtener la bandera sino para lograr un cambio a un estilo de vida Laudato Si´. Si esta es una herramienta para lograrlo quiero invitarlos a que asuman el reto, porque estamos haciendo más humana la vida en este planeta.

Danny Solano Gómez

Periodista, licenciado en Producción de Medios, especializado en temas de fe católica, trabaja en el Eco Católico desde el año 2009.

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