Además del Jubileo Universal, la Iglesia en Costa Rica tiene celebraciones especiales.
El Papa Francisco ha inaugurado un Año de la Oración, desde enero 2024, como preparación espiritual para el Jubileo Universal 2025 que iniciará este 24 de diciembre con la apertura de la Puerta Santa en la Basílica de San Pedros. Además, se ha convocado un Jubileo con ocasión de los 350 años de las apariciones del Sagrado Corazón de Jesús a Santa Margarita María Alacoque, que, aquí en Costa Rica, tendrá la apertura de la Puerta Santa el 7 de junio, en el templo Votivo al Sagrado Corazón de Jesús, coincidiendo con la misa de las 6 p.m. Por último, tenemos cerca el bicentenario de la declaración de la Virgen de los Angeles como Patrona de Costa Rica en setiembre del 2024 y el centenario de la coronación pontificia de la imagen de Nuestra Señora de los Angeles en abril del 2026.
“Lo que estamos viviendo con el sínodo de sinodalidad, con estos años jubilares y celebraciones marianas en Costa Rica constituye realmente un tiempo de abundante gracia, bendición y misericordia. La apertura de una Puerta Santa abre la posibilidad de ganar indulgencia plenaria si se tienen todas las condiciones requeridas (orar por las intenciones del Papa, confesarse, comulgar y rezar el credo). Invitamos a todo el Pueblo de Dios a participar en las actividades que se han preparado para estas celebraciones y, sobre todo, a unirse en oración y aprovechar este tiempo especial de gracia para acercarnos más a Dios”, mencionó Mons. Bartolomé Buigues Oller, Obispo de Alajuela y secretario general de la Conferencia Episcopal de Costa Rica.
Sobre el Jubileo Universal 2025 “Peregrinos de Esperanza”
Este miércoles, 25 de octubre, fue publicada la Carta de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos al Pueblo de Dios. Compartimos el texto integral aprobada por la Asamblea sinodal.
Queridas hermanas, queridos hermanos:
Francisco da un paso hacia adelante en materia de igualdad en la historia de la Iglesia. Por primera vez, podrán votar los laicos, tanto hombres como mujeres, que sean elegidos para participar en la Asamblea del Sínodo de la Sinodalidad que se celebrará en dos sesiones en Roma, en octubre de 2023 y de 2024. Se trata de una decisión inédita en tanto que, hasta ahora, podían participar en el foro vaticano creado hace seis décadas por Pablo VI, pero solo los obispos tenían derecho a votar en el documento final.
Los organizadores de la Asamblea General Ordinaria del Sínodo anunciaron hoy estos cambios que no acaban aquí. También se eliminará en la asamblea sinodal la tradicional figura de los auditores en la asamblea donde se solía dar cabida a los laicos, al igual que la figura de los expertos. Con voz, pero sin voto. En su lugar, habrá otros 70 miembros, entre los que pueden ser elegidos sacerdotes, personas consagradas, diáconos o fieles laicos y que procedan de las Iglesias locales.
Y, ¿cuál será el criterio para escogerles? Serán elegidos por el Papa de una lista de 140 personas indicadas durante las reuniones internacionales de las conferencias episcopales y la Asamblea de Patriarcas de las Iglesias Orientales Católicas. “A la hora de identificarlos, se tendrá que tener en cuenta no solo su cultura general y prudencia, sino también sus conocimientos, tanto teóricos como prácticos, así como su participación en diversas capacidades en el proceso sinodal”, han informado desde la Asamblea General Ordinaria del Sínodo. Se espera que la mitad de estos participantes sean mujeres y todos votarán.
Además, se incluye la participación de cinco religiosas como representantes de las congregaciones religiosas femeninas, cuando hasta ahora solo tenían asiento reservado los religiosos sacerdotes pertenecientes a Institutos de vida consagrada. En ambos casos, no es la Santa Sede quien elegirá a estos delegados, sino la Unión de Superiores Generales y la Unión Internacional de Superioras Religiosas.
Al presentar hoy estas novedades, Jean-Claude Hollerich, arzobispo de Luxemburgo y relator del Sínodo de la Sinodalidad, matizó que, en su opinión, “no es una revolución, pues la asamblea sigue siendo una reunión de obispos, con una participación de no obispos”. Y es que cerca del 75% de los participantes seguirán siendo prelados.
En esta misma línea, el cardenal Mario Grech, secretario general del Sínodo, apuntó que “seguirá siendo un Sínodo de obispos, pero habrá esta participación como miembros de laicos”. “Su presencia y participación no solo asegura el diálogo entre profecía del Pueblo de Dios y el discernimiento de los pastores”, sentenció.
Cuando se cumplen diez años de la elección de Jorge Mario Bergoglio y después de innumerables alusiones del Pontífice argentino sobre la necesidad de reconocer institucionalmente a la mujer en la Iglesia, es ahora cuando se produce este salto cualitativo y cuantitativo.
Este año, en el marco de las celebraciones en honor a Nuestra Señora de los Ángeles, se realizó el I Congreso Teológico Pastoral: “Nationis Benigna Patrona”, cuyo tema fue: La compañía maternal de María en nuestro camino eclesial de comunión, sinodalidad y misión”.
Del 26 al 28 de julio 2022 la Comisión Nacional para la Sinodalidad se reunió durante tres días para redactar la síntesis nacional, que es el aporte de Costa Rica al próximo Sínodo de los Obispos que se realizará en octubre del 2023. El documento ya fue enviado a la Secretaría para el Sínodo a inicios de agosto previamente aprobado por los Obispos. Ya se ha cerrado la fase diocesana del proceso sinodal y se ha iniciado ahora la fase continental.
Sobre la metodología de la elaboración de la síntesis Monseñor Oscar Fernández, Obispo de Puntarenas y quien preside la comisión comenta: “luego de un proceso de consulta a todo el pueblo de Dios, las comisiones diocesanas a cargo del proceso nos enviaron su síntesis diocesana. Al ser este un proceso espiritual, pedimos oración y cada día durante la encerrona para la redacción de la síntesis nacional iniciamos con la Santa Eucaristía. Comenzamos con una lectura profunda de los documentos y luego sacamos los puntos claves de todos, respetando el contenido y luego los dividimos por áreas e iniciamos la redacción de acuerdo con los diez núcleos temáticos dados por la Secretaría”.