La ceremonia se realizará el 6 de julio, en la Catedral de Santa María Asunta, en Crema, Italia. Precisamente, en ese país Rosibel ha servido al Señor y ha realizado diferentes trabajos. Actualmente, se especializa en el sector de alimentos y restaurantes.
Según comentó a Eco Católico, ha tenido la oportunidad de conocer muchos estilos de vida consagrada, entre ellos, el Ordo Virginum, del que se sintió atraída, ya que, según dice, percibió algo diferente y decidió informarse más.
Justamente, se trata de una vocación dentro de la Iglesia como cualquier otra, de hecho, es considerada la primera forma de vida consagrada femenina en la Iglesia Católica, nacida de la necesidad que experimentaban algunas mujeres de seguir a Cristo más de cerca, como explica la misma Rosibel.
Básicamente, las mujeres hacen el propósito de vivir en virginidad y castidad perpetua. No es una congregación religiosa, un movimiento eclesiástico o una asociación, sino una categoría, un Orden en la Iglesia.
Las Vírgenes Consagradas viven su vocación en medio del mundo secular, con su oficio, profesión, pasatiempos, servicios en la comunidad, etcétera.
Las mujeres solteras que sienten el llamado de Dios a una vida consagrada, pero no religiosa, pueden encontrar en el Ordo Virginum una manera de responder a ese llamado. Si alguna tiene la inquietud puede acercarse a su obispo o Curia Diocesana y solicitar información del proceso.