Rafael “Macho” Rodríguez Murillo cosecha lechuga hidropónica en Playa Hermosa y vende a algunas empresas de la zona, sin embargo, debido a la situación por la pandemia no le han hecho pedidos. Aunque podía intentar colocar la producción en otra parte decidió donarla a la Parroquia San Jerónimo, en Sardinal de Carrillo.
Esta mañana realizó la segunda donación de cerca de 1000 lechugas para entregar a personas necesitadas de la comunidad, un gesto que el Párroco, Pbro. Marcos Morales agradeció.
“No vender el producto significa una pérdida en términos económicos, pero esto no es una pérdida, es una bendición, esto es un granito de arena, si entre todos nos apoyamos salimos adelante”, dijo Macho Rodríguez.
Este pequeño productor también mencionó que, aunque la situación de pandemia lo ha perjudicado económicamente hay personas que necesitan y que están pasando momentos muy difíciles.
El padre Morales fue personalmente a recoger la lechuga para luego distribuirla en la comunidad bajo las medidas de higiene solicitas por las autoridades.