En 1893 Monseñor Bernardo Augusto Thiel, II Obispo de Costa Rica, “se atrevió” a publicar una Carta Pastoral titulada Sobre el justo salario de los obreros y artesanos. Con ella buscó introducir la Doctrina Social de la Iglesia Católica en el país, a pesar de que el gobierno liberal no veía este tipo de propuestas con buenos ojos.