“Que este sea un signo que sirva a nuestra Iglesia y a la sociedad, como mensaje de que tenemos que cuidarnos unos a otros, particularmente a los más necesitados”. Así habló Mons. Bartolomé Buigues, obispo de Alajuela, el pasado 17 de octubre, al momento de colocar la primera piedra donde estará la Casa Sacerdotal San Juan Nepomuceno.
Se trata de un complejo de pequeños apartamentos para sacerdotes mayores de 75 años y enfermos, el cual estará ubicado en el sector conocido como La Mandarina, en Barrio San José de Alajuela, contiguo a la Casa Episcopal.
Este proyecto comenzó a gestarse durante el episcopado de Mons. Ángel San Casimiro, en el año 2017, con la compra de un terreno en La Garita de Alajuela. Al parecer, ha avanzado más rápido de lo que se esperaba, especialmente gracias al apoyo solidario de muchos fieles.